Si se te ha estropeado algún interruptor de tu vivienda y no quieres gastarte dinero llamando a un electricista, puedes arreglarlo tú mismo ya que no es una tarea difícil. Solo vas a necesitar unas herramientas básicas como un buscapolos, un destornillados y un pelacables. Pero si nunca antes has arreglado un interruptor, tienes que sabe que hay que tomar ciertas medidas mínimas de seguridad para evitar cualquier accidente.
Lo primero que debes hacer es desconectar el cuadro de luz para quitar la corriente. Por eso deberás realizar este trabajo durante el día cuando haya bastante luz. También debes procurar que la zona en la que vas a trabajas no se encuentre mojada y que tú también estés perfectamente seco, para que no resulte peligroso. Usa si es posible, un calzado que tenga una suela de goma.
Averiguar la avería
Lo primero que hay que hacer antes de arreglar un interruptor, es saber dónde está el origen de este problema. Para ello retira su embellecedor y quitar los tornillos. Conecta el cuadro de luz y con la ayuda de un buscapolos comprueba que el interruptor esté recibiendo corriente. Si es así, lo más probable es que el problema se encuentre o bien en el embellecedor o bien en el mismo interruptor, por lo que deberás cambiarlo.
Si no se recibe ningún tipo de corriente o se encuentra suelto algún cable, puedes arreglarlo con ayuda del pelacables. Para ello corta la parte estropeada y vuelve a conectarlo. Si continua sin funcionar después de esto, lo más seguro es que el problema se encuentre en la instalación eléctrica propiamente dicha, por lo que será necesario que recurras a un electricista.